Rosa Estela Olvera Jimenez

Emigrar legalmente y vivir normal (vivir de su trabajo no en la opulencia pero no el la pobreza) en un pais mas 'avanzado' (whatever that means) facilita el olvido de ciertas cosas desagradables vividas en el pais de origen. A manera de mecanismo de defensa se elimina el espectro de sentimientos doloros causado por la intimidacion ejercida por una persona de poder (real o percibido).  Se me viene a la mente la odisea que siempre fue atravesar la frontera entre Mexico y Gringolandia. Y no hablo de cruzar el rio Bravo nadando, hablo de que para una persona de clase media y con los papeles necesarios y dinero para ser turista, el pasar esa frontera es una experiencia sumamente desagradable, ahora bien, para quienes se pasan de mojados esto es devastador y cruzar es solo el comienzo de una serie de situaciones adversas a menor o mayor escala.
Hace poco vi este documental que narra la historia de una de tantas mexicanas que se va de mojada a Estados Unidos acariciando de una manera modesta el suenio americano, para terminar en una situacion terrible. No dire nada porque quiero que quienes me leen (mi familia y pocos amigos) vean el documental y comentar despues.  
Vivir en Canada me ha hecho desarrollar empatia ante la desigualdad social que ocurre en otros paises, pero en un plano personal, al no ser yo victima de discriminacion e injusticias me ha dado seguridad y una ilusion de igualdad al grado de que este documental me hizo darme cuenta que ya se me habia olvidado el dolor sicologico que me provoco sentirme discriminada en esas idas a Estados Unidos, y en lo mal que uno puede ser tratado por no ser de raza blanca o no ser rico. Pienso que millones de mexicanos pasan por un infierno al irse a Estados Unidos y que mi experiencia es minima comparada con la de millones. Vivir en Canada me ha hecho creer en la idea de igualdad de trato (no igualdad de condiciones), y no que no exista la discriminacion en este pais (la hay!) pero no es flagrante como en EUA (porque Canada no tiene aun el mismo volumen de inmigracion tampoco, entonces acaso sera solo cuestion de tiempo?). Realmente quiero hacer algo para ayudar a quienes tienen menos suerte que yo, de nada sirve enterarse de casos de injusticia social si no se va a pasar a la accion. Es ciertamente facil volcarse en la lastima, la frustracion y la impotencia pero es dificil hacer algo para que las cosas mejoren porque tampoco yo la tengo tan facil. La filantropia es la sicoterapia de los ricos. Sin embargo, ya es tiempo de la praxis!