Esta vez no podras recibir una carta como dios manda, en su sobre con estampillas como te gustaba. No podras guardarla y estarla sacando para que quienes te visiten vean que te escribo. No pude ir a tu funeral, y honestamente al final me comporte como si fueras a durar para siempre. Ya no te llame, no te escribi, ni te mande saludos, ni pense mucho en ti. Me exasperaba como le estabas cargando la mano a todo mundo y lo indulgente que fuiste con quienes menos estaban ahi para cuidarte. No me siento culpable porque la amistad que tu y yo tuvimos fue a prueba de fuego. Una amistad que no encontrare jamas. Me acuerdo que cada diciembre eras de decir que para la proxima navidad ya no la armarias...siempre la armabas, mas no esta vez.
Quiero creer que cuando vaya a Chihuahua podre ir a tu casa y abriras la aldaba de la puerta de spring. Nos echaremos un nescafe. Recuerdo tu azucarera de plastico marca tupperware, y las clasicas tazas de peltre y como me encantaban las tortillas de maiz tatemadas con crema y sal que solias ofrecer a quienes te visitaban. Me acuerdo de los frijoles refritos, las papas con cebolla, y el chile colorado... Siempre dijiste que eras pesima cocinera porque no hacias nada sofisticado, pero no es cierto, nunca volvi a probar nada asi, aun cuando trato de cocinar las mismas cosas...no es como tu comida.
Gracias por quererme y aceptarme tal cual.
Gracias por las risas, las bromas, los abrazos...
Fuiste la unica que me inculco una religion. A pesar de la inevitable consolidacion de mi ateismo, los recuerdos de tus ensenianzas catolicas se volvieron pedazos de esperanza para mi en tiempos de crisis.
Recuerdo la higuera y el naranjo
el cuartito de tiliches
tus plantas ("las hierbas")
los canarios
la sala roja y los "retratos"
tus vestidos de flores
y el ropero con su clasica llave
Estas muerta y yo
yo no lo puedo creer!
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