Nunca habia ido a la 'Place des Arts'...mis prejuicios y costumbres mexicanas clasemedieras me habian dictado que eso era solo para ricos. Se me habia olvidado que aqui en Canada, hasta siendo mesero, conserje o enfermera (partiendose la madre chambeando) se puede hacer un tour por el mundo, ser 'critico' de arte, ir a la Opera y no se diga, practicar la 'filantropia' que esta tan de moda, Todo esto sin ser rico. La sala Wilfrid Pelletier resulto ser un insulto arquitectonico...el disenio no muy a mi gusto pero vaya, de que les ha de haber costado caro no hay duda. Regla numero uno: todo es caro, no lo olvidemos! como el horror de 'obra de arte' que habia en el lobby: "Les anges radieux" tres estructuras gigantescas en laton suspendidas en el aire, que de lejos mas bien parecian hechas en mimbre (al cual le habia caido un aguacero) y que de angeles no tenian nada, mas que las cabezas mochadas...o lo que yo inteprete como falta de cabeza... ok ok fin de la capsula negativa.
Recorde al Teatro de los Heroes en Chihuahua, al estar en la sala W. Pelletier senti cierta familiaridad, cierta dicha...raro en mi psique ultimamente. Al principio solo habia tambores chicos en el escenario y dije -pinches tambores de banda de guerra chafita!- Me trague dicha reflexion enterita desde la increible apertura. Fueron dos horas de excelente arte. Como en todo buen show, lo mejor se dejo para el final...los tambores fueron aumentando de tamanio y el sonido se fue combinando impresionantemente, todo vibraba en el teatro, los aplausos se fusionaban con el sonido, la audiencia que en su mayoria estaba compuesta de gentes de raza blanca estaba poseida por el ritmo y la belleza del espectaculo, eso si que era un milagro, los blancos echando buen relajo! hasta los angeles radiantes me parecieron al final una obra maestra sin igual (bueno ahi si tampoco...pero es de familia esto de exagerar, jajaja) La energia de los artistas era contagiosa, crei por enesima vez haber encontrado mi verdadera vocacion, llegando a la casa sacaria unas barricas como percusiones y me agenciaria unas baquetas para empezar a practicar! :)
ok, no pues...pero se capto el punto. :)
Mi 'Nipponfilia' se me habia olvidado. Este show me hizo recordar lo mas chido que me ocurrio en 1999, mi viaje a Japon! hasta se me antojo beber sake...a mi que nunca me gusto! y de que vendian vendian pero a que precio! mis costumbres mexicanas me prohiben pagar precios que no corresponden a lo que valen las cosas...pero eso es tema pa' otro debate.
Yamato esta en mi top ten de cosas que uno tiene que ver antes de morir, esos si son tambores!
http://www.youtube.com/watch?v=8dn1FgA54m8&feature=related
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